El primer día ha mejorado las expectativas. Hemos encontrado más de lo previsto. Nos hemos dividido en dos grupos. Yo estaba en el Equipo A con Laia (directora técnica), Pere Rullàn (experto local), Toni, Elisabeth, Maria Antònia y Julie (de EEUU). Nos ha tocado Son Corb. El Equipo B lo formaban Gonzalo, Judith, Melanie, Kiko y Mateu, y se han marchado a Na Penyal.
Son Corb es una montaña agreste, llena de zarzas, que hace difícil caminar. Estamos llenos de pinchazos. Las camisetas se enganchan y se rompen. Maria Antònia llevaba pantalón corto y tiene las piernas llenas de estigmas.
Hemos encontrado varias estructuras de pozos de tirador y nidos de ametralladora en la zona alta mirando al norte. Ha sido muy emocionante ir encontrando toda la línea de defensa republicana. Allí se defendieron del ataque nacional que venía desde el norte (Pula) el 2 de septiembre de 1936.
El calor ha apretado a partir de las 10 de la mañana y las gotas de sudor mojaban el diario de anotaciones. Esa era mi labor: hacer la crónica técnica y audiovisual. Los demás se encargaban también de la cámara, del GPS, los jalones, rellenar las fichas de cada sitio, etc. Íbamos bien equipados: pantalón largo (casi todos), botas, comida, bebida, etc. Pero aún así, a las 11 nos hemos quedado sin agua y hemos tenido que bajar al pueblo. Eso nos ha dado fuerza para encontrar tres estructuras más, al menos dos de ellas creemos que del bando nacional, mirando al este. A las 13.30 hemos vuelto a casa porque el calor era insoportable. De hecho, hoy había alerta por altas temperaturas.
Por la tarde hemos estado transcribiendo fichas, descargando fotos y vídeo, revisando mapas y preparando la misión de mañana. Hay buen rollo en el equipo. Es un honor aprender de arqueólogos y otros historiadores de la guerra civil. Después de cenar hemos ido un rato a la Església Nova de Son Servera (es una pasada) a ver un espectáculo de ball de bot.
Ahora son las 23.30 horas y nos vamos a dormir que nos levantamos a las 5.30. Estoy deseando que sea mañana. Iremos a Na Penyal y el Puig de Sa Font. ¡Ahora las expectativas son altas!
La Batalla de Mallorca 